Capítulo
29
-Antes-
Pasaron
dos semanas desde aquella conversación en la cena. Chiara y Padre no
se hablaban. Las comidas y las cenas eran especialmente silenciosas.
Cuando uno de los dos abría la boca, si es que lo hacía, era para
meter comida en ella o para discutir el uno con el otro. Chiara no
dejó de amenazarle con fugarse. Padre no la creyó.
Padre
anunció que estaba mirando con Cesare fecha para la boda, ya que
Chiara no estaba por colaborar. Aparte de eso, Padre prohibió a ésta
salir de casa si no era con Alessandro, para así evitar que Giovanni
y Chiara se viera. Así es como me convertí en el intermediario.
Llevaba cartas de uno a otro, conseguí que se vieran algunas
noches... Todo por mi hermana.
-Chiara,
Giovanni me ha dado esto- dije a Chiara después de haber estado con
Giovanni. Es lo menos mafioso que he visto nunca. es... diferente a
los demás. Chiara tiene razón. Le entregué el sobre que me dio
Giovanni y del cual Chiara sacó un colgante en forma de llave. Había
una nota dentro que leyó entre susurros.
-Te
quiero Chiara, y como muestra de nuestro amor te doy este colgante.
La llave de todo mi ser, de mi felicidad, mi tranquilidad, mis
miedos... Lo eres todo. Te necesito. A cambio me quedo tu candado. El
candado que lleva bajo él tu felicidad, tus miedos... Pues mientras
estemos juntos, nadie te hará daño y serás feliz. Estoy buscando
la manera de salir de aquí, cuidar de ti. Superaremos todo y
conseguiremos estar juntos. Te amo —dijo Chiara con los ojos llenos
de lágrimas.
Un
tiempo después, Padre se deshizo de mí mandándome a Alaska. Yo lo
vi claro. Sacaría a Chiara y a Giovanni de Italia y los llevaría
conmigo a España, pues todos los del proyecto, o al menos casi
todos, serían españoles. A Chiara le pareció buena idea. Haría
cualquier cosa por ella, por su felicidad, aunque fuera a costa de mi
familia y mi vida. Nos han educado pensando en la familia y en cuidar
de los hermanos pequeños. Yo iba a cuidar a Chiara siempre que
pudiera, hasta mi muerte.
En
cuanto lleguen a España, Giovanni y Chiara tienen pensado hacerlo
todo oficial y casarse, cambiarse los nombres si es posible. Quieren
vivir lejos de la mafia, sin tener nada que ver con ella. Y yo,
tendré que renunciar a ella por Chiara. Es la única opción. Vivir
una vida sin la mafia se me antoja difícil. Solo conozco como es la
vida con ella. Tal vez la vida sin ella me sorprenda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario